Esta es una historia fictícia, pero la situación que describre es muy real: la violencia sexual contra las mujeres en los conflictos bélicos. Hana vive un doble exilio, tanto geográfico como íntimo; y Sara ansía la libertad que le otorgará cumplir dieciocho años. Las dos se enfrentarán a una realidad incómoda, fruto de decisiones pasadas que todavía reverberan en el presente.
Este libro es una joya. La escritura de Marta Carnicera es genial, fluye como un riachuelo de alta montaña, entre piedras y otros obsáculos, pero nada hace que se tropiece. La lectura fluye y, con ella, las emociones desbordan. A veces se vuelve insoportable, como insoportable es la vida para las víctimas supervivientes de la peor de las violencias sexuales, pero eso no impide continuar la lectura; al contrario, queremos acompañar a Hana y a Sara en sus viajes y descubrimientos familiares.
Martí Segura
